Aunque los 200 metros de altura del edificio In Tempo quedan en casi nada en comparación con los 828 metros del Burj Khalifa de Dubai, el edificio terminado más alto del mundo, y con los proyectados 1.000 metros del Jeddah Tower de Arabia Saudí -cuyas obras están actualmente paradas-, lo cierto es que el dibujo urbano de Benidorm sigue impresionando.
La capital turística de la Costa Blanca se mantiene como la tercera ciudad con la mayor concentración de rascacielos de Europa y la primera en el mundo en lo que a altos edificios por habitante se refiere. Una carrera hacia el cielo que arrancó con el edificio Front Al Mar, que plantó los cimientos de sus 14 alturas (hasta entonces, el máximo era cinco) en 1960 y que, desde entonces, ha ido menguando hasta ostentar únicamente el venerable título de tatarabuelo de todo lo que vino después.
Para que el ‘skyline’ de Benidorm sumara su primer rascacielos verdadero hubo que esperar, eso sí, un poco más. Fue la Torre Coblanca, que en 1969 elevó sus 30 pisos hasta los 94 metros de altura, todo un récord para la época y una declaración de intenciones basada en la famosa anécdota de la cajetilla de tabaco para ilustrar lo que construir en altura significa en términos de ocupación de suelo.
El desarrollo de este sector supone un profundo cambio en el dibujo urbano de la capital turística de la Costa Blanca
Ciudad muy diferenciada
Benidorm es conocida mundialmente por sus playas, sus infinitas opciones de ocio y su silueta urbana… y no necesariamente por este orden. Esa apuesta por la construcción en altura y, por lo tanto, una alta densidad de población, ha generado odios y pasiones en posturas difícilmente reconciliables; una fama que, en cualquier caso, sorprende que venga de tan lejos cuando nos paramos a pensar que la inmensa mayoría de las torres que superan los cien metros de altura se construyeron después del cambio de siglo y que, a la vez, casi todas se concentran en una zona muy concreta de la ciudad.
Contrariamente a lo que sucede en otros muchos puntos del planeta, donde este tipo de edificios son destinados principalmente a un uso empresarial, la mayor parte de las 22 torres que superan aquí el hectómetro vertical son de uso residencial. Así mismo, un ejemplo claro lo tenemos con la Cuatro Torres Business Area de Madrid; Benidorm no ha concentrado en un solo punto sus construcciones en altura, sino que las mismas han ido ganando terreno hasta convertirse en la forma de edificación más implantada.
Un movimiento al que, por muchos motivos, había sido relativamente ajena la zona de Poniente de la ciudad. Se producía la paradoja de que dos de los edificios más emblemáticos de la capital turística, el Gran Hotel Bali y el InTempo, se ubicaban allí; pero seguía siendo la zona de Levante la que concentraba la mayor parte de los rascacielos.
Las altas torres, hasta ahora patrimonio casi exclusivo de la ‘milla de oro’ de Levante, se apoderan también de Poniente
Crecimiento a lo ancho
Pero eso está cambiando ahora de una forma muy acelerada. Fue en el año 2019 cuando el Grupo Inmobiliario TM oficializara sus planes para el PP 2.1 Poniente, un proyecto que afecta a más de 130.000 metros cuadrados de terreno, lo que lo convierte, junto al Ensanche Levante, en la mayor bolsa de suelo en desarrollo en la ciudad.
El Plan Parcial 2.1 de Poniente contempla 45.000 metros cuadrados de suelo para uso residencial de altura libre
De ese total, algo más del 60% se está destinando ya a la creación de zonas de uso público (viales, parques, zonas verdes…), pero lo que realmente está cambiando o armonizando, como se prefiera, la fisionomía del municipio son los 45.000 metros cuadrados que se destinan a uso residencial con altura libre y que ya han tomado forma.
El cada vez más cercano final de la pandemia parece haber supuesto, a su vez, una aceleración en los trabajos que ya se están llevando a cabo en la zona desde hace algo más de un año y que supondrá que Benidorm, además de a lo alto, crezca a lo ancho, llevando su ya icónico skyline a una zona que, quizás incomprensiblemente, se había mantenido hasta ahora ajena al desarrollo urbanístico que sí se apoderó hace ya décadas de la otra punta de la ciudad.
Del mar al cielo
Edificios de más de 100 metros: 26
Edificios de más de 100 metros en construcción: 1
Edificio más alto: Intempo (192 metros)
Hotel más alto: Gran Hotel Bali (186 metros)
Primer edificio de más de 100 metros: Torre Levante (120 metros, 1985)