La noche de Reyes es uno de los momentos más especiales para niños y adultos. Es el día en el que nuestro lado más infantil sale a relucir con todo su esplendor y en el que todos disfrutamos con las clásicas cabalgatas, el roscón y el chocolate… Al hilo de esto, los eldenses suman a esta retahíla de tópicos una tradición que perdura desde hace 61 años: el descenso de antorchas desde Bolón.
En 1957 un grupo de montañeros inició esta particular tradición
Una particular tradición
Esta particular tradición se inició en la localidad en el año 1957, cuando un grupo de montañeros del Centro Excursionista Eldense (CEE) ascendieron a Bolón y posteriormente descendieron con antorchas con las cuales poder alumbrarse a ellos y a los Reyes Magos, que comenzaban su travesía hacia la ciudad de Elda, dejando de este modo en el monte un sendero visible e iluminado que se podía apreciar desde toda la ciudad.
Los montañeros del CEE fueron en sus inicios los encargados de organizar todo lo referente a este acto. Ahora la organización del acto corre a cargo del Ayuntamiento de Elda, aunque sigue contando con la inestimable colaboración de los montañeros del CEE. Dicho acto necesita también de la participación de la asistencia sanitaria.
Con el nacimiento de esta tradición, la cabalgata también se vio afectada, dado que se decidió conectar el descenso del monte con el inicio de la misma. Evidentemente, era una decisión coherente, ya que como comentábamos, los propios Reyes Magos son quienes descienden de Bolón para desfilar por las calles de la localidad.
Ascenso al monte
Este acto, que en su día era realizado tan solo por los montañeros del CEE, evolucionó hasta el punto de que familias enteras aprovecharan el 5 de enero para ascender la montaña y pasar el día junto con los cientos de personas allí presentes, hacerse la típica foto con la cruz de Bolón y luego iniciar el descenso con las antorchas. La cruz reina sobre la cima de Bolón y, por lo tanto, es el claro objetivo fotográfico de todos los que ascienden al monte, como prueba inequívoca de que han alcanzado la cima.
Pese a todo, esta longeva tradición ha sufrido alguna que otra modificación y no ha estado exenta de polémica. El fuego siempre ha sido un asunto que en cierto modo ha preocupado a un gran sector. Es evidente que es peligroso tanto para los propios portadores, como para el propio monte ante la posibilidad de poder desencadenar un incendio.
En el año 2015 se prohibió el uso de antorchas para evitar incendios
Prohibición de las antorchas
Todo este desencadenó que en el año 2015 se prohibiese el uso de antorchas por la peligrosidad de las mismas, sustituyéndolas por unas antorchas de luces LED que despertaron una gran polémica entre la población eldense. Tanto fue el revuelo, que el día previo al descenso del monte la cruz apareció cortada y tirada por la montaña, siendo encontrada posteriormente por los montañeros del CEE.
La mañana siguiente, una expedición (en la que participó el alcalde eldense Rubén Alfaro) ascendió la montaña y procedió a reparar la cruz para que todo estuviera perfecto para el momento del descenso.
Al año siguiente, se buscó regresar a la fórmula habitual mediante el uso de antorchas y luces LED, pero en aquel caso fue la climatología la que impidió que las antorchas pudieran descender por el sendero. La alerta por viento y alto riesgo de incendio forestal condenaron los esfuerzos que se habían realizado para recuperar la esencia de la tradición y el sendero quedó iluminado por unas 300 luces LED.
Declaración de Bien Inmaterial
Finalmente, en el año 2017 la climatología permitió que el descenso del monte volviera a estar iluminado por las tradicionales antorchas. Concretamente un total de 100, que a su vez fueron acompañadas por 200 antorchas de luz artificial. El resultado no pudo ser más positivo, dado que al mismo tiempo que se respetaba la tradición, se preservó la seguridad forestal y personal en todo momento.
El pasado mes de septiembre, en el Ayuntamiento de Elda se aprobó en pleno la solicitud para convertir el descenso con antorchas de Bolón en Bien Inmaterial de Relevancia Local y, además, también se aprobó otra solicitud en la cual se pedía inscribir el recorrido de la senda de Bolón en el registro de emplazamientos para actos y festejos tradicionales que pueden usar fuego.
El inicio del descenso del monte coincide con el inicio de la cabalgata de los Reyes Magos
Ilusión, tradición, melancolía… Son muchos los sentimientos que puede despertar en la gente la noche de Reyes. Sentimientos que aunque aparecen tan solo una vez al año, resultan imprescindibles en la vida de uno. El descenso con antorchas de Bolón es una tradición con forma de sentimiento y con sabor a recuerdos, es por eso que Elda y los eldenses no quieren perder esta tradición.