Es un mantra repetido hasta la saciedad por expertos y profesionales del sector, pero aquello de que ‘los incendios se apagan en invierno’ es algo a lo que, por desgracia, hemos visto en demasiadas ocasiones hacer caso omiso a las distintas administraciones públicas.
El área de Urbanismo cuenta ahora con una persona dedicada en exclusiva a vigilar el correcto mantenimiento de las parcelas
Plan de limpieza
No es el caso de l’Alfàs del Pi, que lleva ya un tiempo trabajando en un plan de limpieza de solares rústicos que, entre otros importantes objetivos, trata de sentar las bases para que el municipio viva otro verano sin fuegos de importancia en su término municipal.
Durante las últimas semanas y meses, los alfasinos han podido ver una gran cantidad de máquinas y operarios trabajando en sus caminos y zonas rurales limpiando y desbrozando parcelas que llevaban años acumulando todo tipo de elementos, naturales y artificiales, que podían convertirse en el combustible ideal para un incendio de grandes dimensiones.
Toni Such, concejal de Urbanismo de l’Alfàs del Pi, ha explicado que “llevamos ya tiempo enviando notificaciones a los propietarios de las parcelas, y ahora hemos reestructurado el departamento y contamos con una persona que se dedica de forma específica a estas cuestiones. Así, está visitando las parcelas de todo el término municipal y, cuando detecta que no están correctamente limpias y mantenidas, mandamos un aviso a su propietario”.
Tras esta primera fase, se controlará que las parcelas se mantengan siempre en buenas condiciones
Respuesta positiva
El edil alfasino explica que en esas notificaciones recuerdan que “todos estamos obligados a mantener nuestras parcelas y que, si no lo hacen sus propietarios, será el ayuntamiento el que proceda a realizar esos trabajos cargándoles el coste correspondiente. He de decir que la gente está respondiendo muy bien a esta iniciativa”.
Such añade que “hay zonas con mucha pinada que no se habían limpiado en años. Estas actuaciones nos permiten, además de prevenir incendios, dar respuesta a las quejas de los vecinos de las parcelas más cercanas a viviendas, que nos trasladaban estar teniendo problemas de aparición de ratas. Además, confiamos en que, si las parcelas están limpias, los desaprensivos que tiran escombros y enseres en ellas, dejen de hacerlo”.
«Nuestra pelea ahora es con la CHJ para que limpie los barrancos, porque ni lo hacen ellos ni nos lo dejan hacer a nosotros» T. Such
Prevención de inundaciones
Aunque inicialmente pueda parecer un oxímoron, el mismo riesgo que estas parcelas suponen en términos de incendios los representan también en cuanto a inundaciones. L’Alfàs del Pi es, por su orografía y según recogen los planes de riesgo de la Comunidad Valenciana, uno de los municipios con mayor peligro de inundabilidad de toda la región, algo que, lógicamente, recomienda que sus zonas rurales se mantengan lo más limpias posibles para evitar la aparición de balsas de agua cuando lleguen las lluvias torrenciales.
Toni Such asegura que “somos muy conscientes de ese riesgo y tenemos aprobado un plan de prevención de inundaciones y estas limpiezas van a ayudar mucho cuando lleguen las mismas. Tener las parcelas bien mantenidas hace que el agua no lleve escombros y que se encauce mejor hacia los barrancos… pero hace falta que la Confederación limpie los mismos”.
El edil de Urbanismo de l’Alfàs del Pi se muestra muy crítico con la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ya que “cualquiera que pasee por ellos podrá ver el estado en el que los tienen. Básicamente, ni limpian ni nos los dejan limpiar y es una lucha constante que tenemos con ellos. Nosotros estamos haciendo nuestro trabajo e insisto en que la gente está respondiendo muy bien”.
Campaña de continuidad
El gran reto, una vez que se haya procedido a la limpieza actual, será conseguir que esas mismas parcelas se mantengan en condiciones para no volver a la casilla de salida si vuelven a dejarse perder, algo que “sucede muy rápido. Por eso, vamos a ir recordando esa obligación todos los años. Además, entiendo que la primera limpieza de una parcela que no se ha tocado en años es costosa, pero hacer el mantenimiento tiene un coste mucho más normal”.
Such insiste en la buena voluntad mostrada por la mayoría de los propietarios de las parcelas. “No sólo les obligamos a limpiar, sino a que nos envíen fotos del antes y el después de esas limpiezas. Eso nos ha permitido comprobar como muchos de ellos han decidido vallar sus terrenos para evitar que vuelvan a aparecer en ellos escombreras o que se puedan tirar allí enseres”.
En ese sentido, el responsable del área de Urbanismo recuerda que “vemos que cada vez son menos los puntos de vertidos ilegales que aparecen en el municipio ya que tenemos dos puntos limpios funcionando perfectamente bien y que, como he dicho, los propietarios de las parcelas están poniendo todo de su parte para evitar que eso ocurra”.