Cuando hace unos meses Altea consiguió convertirse en el primer Destino Turístico Inteligente (DTI) certificado del mundo en la categoría de ciudades de menos de 50.000 habitantes, los responsables de este proyecto ya avisaron de que, siendo un logro importante, aquello no era más que el inicio de la parte más importante del mismo. Aquella en la que los ciudadanos y los visitantes de la Villa Blanca iban a poder comprobar los beneficios que convertirse en DTI iban a suponer en su día a día.
Ya en aquel mes de junio, nada más conocerse la buena noticia, el Ayuntamiento de Altea anunció la adjudicación del desarrollo de su plan de Destino Turístico Inteligente a la empresa Xeltus It que, por lo tanto, iba a ser la encargada de dirigir y llevar a buen término los proyectos que se podrían acometer con los más de cuatro millones de euros de inversión llegados a la Villa Blanca a través de la DTI.
Proyectos ya iniciados
El proceso de planificación de estas actuaciones pasa, necesariamente, por implementar soluciones que, basadas en las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías, aborden los problemas más acuciantes del municipio basadas, como exigen el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y la Generalitat Valenciana -que financian junto al ayuntamiento alteano todo el proyecto-, en los principios de sostenibilidad turística y la utilidad de las mismas.
Así, y como ya explicara AQUÍ en Altea el pasado mes de noviembre, uno de los primeros proyectos en pasar del papel a la realidad ha sido la instalación de un nuevo alumbrado en el entorno y el edificio de la Iglesia de la Virgen del Consuelo, permitiendo un significativo ahorro energético y una evidente mejora de la imagen del casco antiguo.
El desarrollo de la aplicación se incluye dentro del proyecto DTI de la Villa Blanca
Movilidad urbana
Pero si en los últimos años ha habido una cuestión que ha centrado buena parte del debate político en Altea esa ha sido la de la movilidad urbana. El equipo de gobierno siempre ha subrayado su intención de ir ganando, poco a poco, espacio para los peatones y los medios de transporte alternativos en las principales vías de la ciudad.
Esa cuestión, fácil de decir, tiene una muy complicada implementación ya que son muchas las sensibilidades e intereses que se pueden ver beneficiados o perjudicados. Y entre todos los puntos a tener en cuenta, siempre aparece uno como la gran piedra angular del proyecto: el aparcamiento.
«Iremos añadiendo nuevas funcionalidades conforme vaya avanzando la ejecución del Plan de Sostenibilidad» X. González
Aparcamiento en tiempo real
Evidentemente, para promover que las personas se muevan por el casco urbano andando, en bicicleta o en cualquier otro medio de transporte que no sea el coche particular, Altea debe procurar a los vecinos y visitantes soluciones reales para dejarlo aparcado y eso, en un pueblo con el trazado urbano de la Villa Blanca, no es sencillo. Por ello, uno de los proyectos estrella del DTI es, precisamente, la implementación de una aplicación (App) para conocer en tiempo real el aparcamiento libre existente.
Tal y como explica Xelo González, concejala de Turismo alteana, “muy pronto será posible saber la disponibilidad en tiempo real de espacios libres en los aparcamientos más importantes de la ciudad a través de una App”.
El proyecto también prevé la creación de un panel de inteligencia de datos
Una App en crecimiento
La responsable del área de Turismo añade que, además de esa herramienta que todos podremos llevar en nuestros teléfonos móviles, el proyecto también prevé la instalación de “señales verticales ubicadas en los propios parkings y en cada una de las entradas de la ciudad”.
Así mismo, la aplicación móvil ofrecerá a los turistas y residentes de Altea “otras informaciones como, por ejemplo, rutas turísticas o recreaciones con realidad aumentada”. Y todo ello, con la intención de ir “añadiendo funcionalidades conforme vaya avanzando la ejecución del Plan de Sostenibilidad”.
Datos de todo el municipio
González también avanza que todo este proyecto también prevé la creación de un “panel de inteligencia de información con el que podremos conocer en todo momento datos relevantes, como el índice de movilidad y pernoctación de los visitantes” algo que, asegura, permitirá “mejorar los servicios en función de los resultados”.
Así mismo, la edil de Turismo explica que toda esa información, así como la que se recojan por parte de los sensores de ruido o las estaciones de calidad del aire, permitirán que “el Ayuntamiento, disponga de un análisis concreto de los datos con el que evaluar el impacto de las futuras actuaciones y establecer métodos correctivos allí donde sea necesario”.