La temporada ciclista 2023 arranca en España con muchas preguntas en el aire. Será la primera, tras casi dos décadas, sin Alejandro Valverde en el pelotón y eso convertirá necesariamente a Enric Mas en el centro de atención mediático y de los aficionados durante los próximos meses. Todo, claro, con el permiso de las jóvenes figuras emergentes con Juan Ayuso (UAE-Emirates) y Carlos Rodríguez (Ineos-Grenadiers) como grandes referentes.
Muchas incógnitas, en cualquier caso, que no se comenzarán a despejar hasta que los ciclistas, cada uno con su calendario particular y sus propios objetivos concretos, den por cerrado su periodo de preparación invernal -la mayoría de ellos, concentrados en la Costa Blanca- y se pongan el primer dorsal del año.
La carrera, con salida en La Nucía y llegada en València, es una prueba apta para los sprinters
Nuevo arranque
Ahora toca volver a empezar. Por delante, una vez más, casi once meses de carreras y muchos, muchísimos kilómetros que pedalear. En un deporte cada vez más global, con pruebas de primerísimo nivel en los cinco continentes y una masa de aficionados creciente en todos los rincones del planeta, Europa sigue siendo la gran cuna del ciclismo y el desembarco en el Viejo Continente se realizará, por tercer año consecutivo, en La Nucía con la salida de la Clàssica CV 1969.
Eso ocurrirá el próximo día 22 de enero, el mismo día en el que en la vecina Benidorm se dispute la penúltima prueba puntuable para la Copa del Mundo de ciclocross. Ese día la carrera que tomó el relevo del desaparecido Trofeo Luis Puig, que celebró su última edición en 2005, dará por inaugurada la temporada internacional en Europa.
Un inicio accidentado
La carrera, que partirá desde la Ciutat Esportiva Camilo Cano, llega con una gran noticia. La Unión Ciclista Internacional (UCI), máximo organismo mundial en el deporte del pedal, ha dado su visto bueno a la subida de categoría de la carrera que parte de La Nucía y termina en València, lo que hará que pueda soñar con una participación todavía mejor que la registrada en sus dos primeras ediciones.
Así, la prueba que se disputará el próximo día 22 de enero será este año de categoría 1.1, es decir, que ya podrá contar en la línea de salida con la presencia de los equipos World Tour, la primera división del ciclismo, algo que hasta 2022 había tenido vetado.
La cita se disputará el 22 de enero con salida en las inmediaciones de la Ciutat Esportiva Camilo Cano
Participación de lujo
Los organizadores, en cualquier caso, todavía no han confirmado la nómina de escuadras y ciclistas que estarán presentes en la misma, pero, como ocurrió hace doce meses, confían en contar con la presencia de algunos de los principales nombres del pelotón ya que muchos de ellos estarán concentrados en las localidades cercanas y podrían aprovechar la circunstancia para darse el primer ‘calentón’ del año.
La que sí se puede dar por casi segura es la llegada a La Nucía de equipos habituales en la Vuelta a España como Caja Rural-RGA, Burgos-BH, Euskaltel-Euskadi o Kern-Pharm, uno de los conjuntos jóvenes más ilusionantes de nuestro país.
Carrera para velocistas
Aunque el trazado de la prueba poco tiene que ver con el que se hizo habitual en las 36 ediciones disputadas del Trofeo Luis Puig, no cabe duda de que será una clásica (nombre que reciben las carreras de un día en el argot ciclista) ideal para los hombres más rápidos del pelotón internacional.
Lo más probable es que la mayor dureza orográfica de la carrera se concentre en los primeros kilómetros de la misma antes de, ya en la provincia de Valencia, afrontar una zona más llana y apta para que los equipos con interés en una llegada masiva puedan controlar el pelotón, y la más que probable fuga inicial para llevar a sus sprinters con las mayores garantías a la línea de meta de València.
Este año la carrera con salida en La Nucía ha subido de categoría y estrenará condición 1.1
Cuidado con el viento
En ese sentido, uno de los mayores peligros que presenta la prueba, además del inicio montañoso por el interior de Alicante, podría llegar de la mano del viento. Si Eolo decide hacer acto de presencia una vez que se regrese a la cota de cero metros sobre el nivel del mar y se circule con el Mediterráneo a la derecha, los temidos abanicos podrían darle un vuelco enorme al guion previsto para la carrera.
Leonardi, último vencedor
El pasado año, el vencedor de la carrera fue el italiano Giovanni Leonardi, un joven ciclista que el pasado mes de noviembre cumplió los 26 años y que defiende los colores del equipo transalpino Eolo-Kometa, cuyo manager general es un viejo conocido de la afición española y un ídolo para muchos: Alberto Contador.
Así pues, él será el más que probable portador del dorsal número 1 en una carrera que, de nuevo, unirá La Nucía con la capital de la Comunitat Valenciana con un recorrido que rozará los 200 kilómetros y dará a su ganador el honor de abrir, un año más, el palmarés del ciclismo en Europa para la temporada 2023.