Hay personas que se levantan muy cansadas, después de haber dormido unas horas razonables, y no entienden la razón. Generalmente ocurre porque tienen un sueño poco reparador que les hace estar fatigados. En ocasiones la causa es la apnea del sueño, una patología que provoca que la respiración se detenga durante breves periodos de tiempo cuando se duerme. Según la revista The Lancet, casi un billón de personas en mundo tiene esta patología, afectando al 4-6% de los varones y al 1-2% de las mujeres.
De forma habitual las personas respiran por la nariz y la boca, el aire baja a la faringe, fluye por la tráquea y va hacia los pulmones. Cuando se está dormido los músculos de la boca, lengua y faringe se relajan ligeramente, pero no lo suficiente como para bloquear la vía de aire.
Por qué se produce la apnea del sueño
Con la apnea se producen episodios repetidos de pausas respiratorias, de unos 10 segundos de duración, por obstrucción de la vía aérea superior, durante el sueño profundo. Los músculos de boca y faringe se relajan demasiado, haciendo que la lengua caiga y presione la parte posterior de la garganta. La faringe se obstruye y se colapsa, a consecuencia de la pérdida del tono muscular de los músculos de la faringe durante el sueño. Esto bloquea completamente el flujo de aire hacia los pulmones.
La apnea conlleva que el descanso nocturno se vea interrumpido contantemente. Además, la falta de oxígeno en los pulmones causa micro despertares, que dan como resultado un sueño poco reparador. La prueba para detectar esta patología es la polisomnografía. En el artículo “Polisomnografía nocturna y métodos alternativos para el estudio de los trastornos respiratorios del sueño”, de los doctores Helena Larramona Carrera e Isidoro Cortell Aznar se explica cómo es la prueba de la apnea del sueño.
Tipos de apnea
Existen dos tipos de apnea del sueño.
- Apnea obstructiva del sueño. Es la forma más común y severa. Las personas que la padecen pueden dejar de respirar durante 20 segundos o más, en multitud de ocasiones durante la noche.
- Apnea central del sueño. En este caso la vía respiratoria puede mantenerse abierta, pero los músculos del diafragma y el pecho dejan de trabajar. Menos del 20% de quienes padecen apnea tienen apnea central del sueño.
Causas de la apnea del sueño
Las causas de la apnea suelen ser multifactoriales. Las más frecuentes son:
- Obesidad. Más del 60% de los pacientes que sufre Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño son obesos. El exceso de peso hace que pueda haber más grasa en las paredes de la faringe (en el cuello y los tejidos blandos), lo que facilita la obstrucción.
- Envejecimiento. Con el paso de los años se produce una pérdida de tono muscular en la faringe.
- Anormalidades estructurales de las fosas nasales o de la oronasofaringe:
- Desviación del tabique nasal.
- Hipertrofia de los cornetes nasales.
- Pólipos y tumores nasales.
- Adenoides o tumores rinofaríngeos.
- Trastornos musculares que afectan a la oronasofaringe.
- Distrofia miotónica.
- Siringomielia.
- Poliomielitis.
- Esclerosis lateral amiotrófica
- Miopatías
- Depósitos de grasa en las paredes de la vía aérea superior.
- Bocios.
- Lipomatosis
- Mandíbula pequeña o que retrocede con una vía de aire estrecha.
Apnea del sueño: síntomas
Los síntomas comunes de la apnea obstructiva del sueño son:
- Roncar. El síntoma principal es el ronquido. El paciente está dormido y no se da cuenta, así que es la persona que duerme con él la que se lo debe decir. Durante los ronquidos deja de respirar, hace una pausa larga. En ronquido es irregular y entrecortado por pausas respiratorias, de gran intensidad y acompañado de jadeos.
- Somnolencia crónica diurna. El 90% de las personas con apnea del sueño se despierta cansado. Esto ocurre porque cada vez que hay una apnea se produce un micro despertar; el cerebro se despierta para poder respirar. Puede ocurrir decenas o centenas de veces durante la noche, lo que hace que el sueño sea muy superficial.
- Interrupción del sueño.
- Dolores de cabeza matutinos
- Fatiga.
- Irritabilidad.
- Concentración disminuida o pérdida de memoria.
- Sequedad orofaríngea.
- Somniloquias. Los pacientes hablan cuando duermen.
Por lo general, cuando una persona ronca, está cansada durante el día y tiene obesidad es casi seguro que tenga apnea del sueño.
Complicaciones de la apnea del sueño
Las principales complicaciones de la apnea obstructiva del sueño son:
- Presión arterial alta.
- Enfermedad cardiaca.
- Latidos del corazón irregulares, llamados arritmias.
- Accidente cerebro vascular.
- Diabetes.
- Se asocia a un aumento del riesgo, entre 3 y 7 veces, de padecer accidentes de tráfico.
Apnea del sueño en niños
La apnea del sueño también afecta a los niños. Según los últimos estudios un 6% de los niños padecen apnea obstructiva del sueño. Son niños que, además de roncar, sudan, tienen pausas en la respiración, terrores nocturnos, enuresis y se muestran muy inquietos porque están luchando para abrir las vías aéreas.
Este descanso inadecuado se traduce en alteraciones del crecimiento, del comportamiento e incluso del rendimiento escolar.
Para su diagnóstico el especialista se basa en la polisomnografía y la exploración de la vía aérea superior.
Apnea del sueño: tratamiento
Existen dos posibles tratamientos, por lo que puede decirse que tiene cura la apnea del sueño.
- Dispositivo CPAP. Es una máquina de presión positiva continua de la vía aérea con un respirador a través de una mascarilla y una interface. Abre la vía aérea y evita que se colapse por la noche. Este dispositivo es cómodo, pequeño y no hace ruido. Gracias a este tratamiento se terminan las apneas desde la primera noche, con lo que el paciente puede descansar y dormir bien.
- Cirugía. Realizando una alteración anatómica en el paciente se puede ampliar el espacio necesario para respirar (extirpando las amígdalas, corrigiendo el tabique nasal, cortando el paladar o avanzando el maxilar inferior). En pacientes con indicación de cirugía se logra una remisión completa en un 90% de los casos. Las cirugías más frecuentes son:
- UPFP (úvulo palato faringo plastia).
- Cirugía con láser.
- Somnoplastia.
- Traqueostomía.
Como recomendación, el médico puede sugerir al paciente que pierda peso. Si lo consigue, va a mejorar las apneas y no roncará tanto.
Prevención de la apnea del sueño
Para prevenir o evitar la apnea del sueño es importante llevar una vida saludable que incluya:
- Evitar la obesidad.
- Dormir de costado.
- No fumar
- Evitar sustancias que den somnolencia, como el alcohol y los sedantes.