Un artículo, publicado en la prestigiosa revista Journal of Quaternary Science, pone de relieve el impacto negativo de la aridez durante el mesolítico en el sureste peninsular. La investigación se centra en el estudio de los campamentos asentados en el borde suroccidental de la antigua Laguna de Villena (Alicante) ocupado por grupos de cazadores-recolectores.
“Conocíamos la presencia de ocupaciones mesolíticas en este yacimiento por excavaciones arqueológicas que efectuamos en los años 2006 y 2007, sin embargo, los nuevos trabajos han ampliado considerablemente el área de excavación y han sacado a la luz restos de hogares y de cabañas”, señala Javier Fernández López de Pablo, investigador distinguido del programa Gen-T, adscrito al Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH) de la Universidad de Alicante (UA). Esto ha permitido estudiar en profundidad los artefactos líticos, así como los restos carbonizados de plantas y semillas que han sido objeto de análisis de carbono 14.
Los estudios de carbono 14 revelan la existencia de dos fases diferentes en las que este asentamiento fue ocupado por grupos de cazadores-recolectores. La más antigua, con una edad comprendida entre 9300 y 9100 años, mientras que la más reciente tiene una antigüedad de entre 8600 y 8250 años. La investigación presenta también estudios cronológicos realizados sobre los sedimentos de la propia Laguna de Villena, con los que han estudiado la evolución de la vegetación del entorno y han podido reconstruir las condiciones hidrológicas. “Estos datos son clave para comprender las causas del final de las ocupaciones mesolíticas. Además, hemos podido identificar, a escala local, una relación entre el final de la ocupación mesolítica en el yacimiento y el incremento de la aridez hace unos 8200 años, que debió afectar negativamente a la Laguna y a su ecosistema asociado”, explica Fernández López de Pablo.
Según el estudio, durante este episodio árido, conocido como el “evento climático del 8.2”, otros yacimientos mesolíticos de la provincia de Alicante y del sur de Valencia dejaron también de ser ocupados. “Este aspecto sugiere un impacto de mayor alcance de la aridez sobre las formas de ocupación del territorio y sobre la demografía de las últimas poblaciones mesolíticas que ocuparon esta zona de la Península Ibérica” concluye el investigador de la UA.
El artículo publicado en la revista Journal of Quaternary Science recoge los resultados de las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en el yacimiento del Arenal de la Virgen realizadas en el marco del proyecto europeo de investigación Paleodem. Coordinado por el investigador distinguido de la UA Javier Fernández López de Pablo, el trabajo ha contado con la participación de un equipo interdisciplinar de investigadores de la Universitat Rovira y Virgili y del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social- IPHES (Tarragona), de la Universidad del País Vasco, de la Universitat de València y de la Maynooth University (Irlanda).