Entrevista > Oksana Babchuk / Intérprete (Dunayivisi, Ucrania, 4-marzo-1984)
Oksana Babchuk vive en Elche desde hace años, y trabaja como intérprete en Cruz roja Elche para atender a los refugiados que llegan de su país. Sus sentimientos son tan mezclados que casi no puede explicarlos, y vive con impotencia el tener que ver el horror de la guerra en su tierra desde la televisión como si de una película se tratara. Por un lado, está el sentimiento de no poder hacer nada, y por otro las ganas de apoyar y ayudar en lo que pueda, como lo hace a través de su trabajo.
En Elche desde hace 15 años
Junto a su marido llegaron a Elche hace quince años en busca de una vida mejor y aquí han formado su familia, su presente, y seguramente su futuro. Está en permanente contacto con sus padres que viven en una región, por el momento segura, a setenta kilómetros de Polonia, y espera poder convencerles para que salgan de allí.
Son días duros para los que como ella se saben a salvo pero sufren en la distancia el horror que está padeciendo su pueblo. Ven pasar las horas pegados a un móvil, permanentemente pendientes de las noticias que llegan de su país y con el alma en vilo. Se aferran a la esperanza de que sus familias estén bien, y lo sigan estando, pero no saben cuánto puede durar esta guerra, y el futuro es incierto.
«Esto ya viene de largo, son muchos años de conflicto»
El primer contacto de algunos refugiados es contigo. ¿Qué es lo que les dices?
Lo primero es tranquilizarles y darles mensajes de apoyo. Hablar con una compatriota les tranquiliza. Mi misión es informarles de todos los trámites burocráticos que tienen que realizar como inscribirse en comisaría, solicitar la tarjeta para el médico, ayudas, etc. y aclarar todas sus dudas, que son muchas.
Algunos, los más afortunados, vienen ya con una familia de acogida que les espera, otros están siendo alojados en hoteles y viviendas que están facilitando ayuntamientos y Cruz Roja entre otros organismos.
¿Cuándo viniste a España?
Yo llegué hace ya quince años. Primero vino mi marido para buscar trabajo y un futuro mejor. Yo vine poco después y tuve que dejar en Ucrania mi hijo, que tenía cinco años, con mi familia hasta que estuviéramos mejor establecidos y en cuanto pude me lo traje, y aquí ha nacido mi otro hijo que tiene ahora cinco años. Aquí está ya nuestra vida.
¿Cómo era la vida en Ucrania antes de la guerra?
Ucrania es un país muy bonito con gentes buenas, lo que ocurre es que la vida es cara allí y no hay mucho trabajo, por eso nos vinimos a España al igual que otros muchos que también lo han hecho.
En cuanto al trabajo es difícil, porque todo es muy caro en relación a los sueldos que se pagan. Mi madre aún trabaja y cobra 140 euros al mes, y mi padre que ya es pensionista cobra 80 euros al mes, pero sin embargo los precios de la comida son caros, y a no ser que te vayas a vivir a un pueblecito pequeño, el alquiler también es caro.
Una casa en Kiev, por ejemplo, no la encuentras por menos de trescientos euros, y con los sueldos que se pagan, se hace muy complicado tener allí una vivienda. Lo mismo ocurre con el gas u otros gastos domésticos. La moneda oficial es la grivna, aunque también se utilizan dólares y euros.
«Mis padres tienen una mentalidad distinta y dicen que ellos no van a dejar su casa»
¿Vinisteis con la idea de volver algún día a Ucrania?
En un principio cuando vinimos si, pero con el tiempo nos hemos establecido en esta ciudad. Aquí ha nacido nuestro segundo hijo, tenemos trabajo y vivimos bien. No tenemos ninguna intención de volver, y mucho menos pensando como va a quedar el país después de esta guerra.
¿Sigues teniendo familia allí?
Si, mis padres siguen allí. Ellos viven en una zona de Ucrania que hasta el momento está tranquila, a 70 kilómetros de Polonia y sé que están bien. Por el momento me comunico con ellos tanto por teléfono como por internet. Hace tres años que no los veo, la pandemia y la situación del país me lo han puesto muy difícil.
¿Y no van a salir del país para venir con vosotros hasta que todo esto acabe?
No consigo convencerles. Mis padres, aunque no son mayores, porque mi madre tiene sesenta años, tienen una mentalidad distinta y dicen que ellos no van a dejar su casa. Si más adelante las cosas cambian en la zona en la que viven, espero poder convencerles para que salgan de allí.
«No tenemos intención de volver, y mucho menos pensando cómo va a quedar el país después de esta guerra»
¿Como veis desde aquí la situación? ¿Crees que habrá pronto una solución?
Aún falta tiempo para que llegue ese día. Esto no va a acabar fácilmente. Viene de largo y son muchos años ya con un conflicto permanente (desde 2014 aproximadamente). Los intentos de Rusia por quitarnos Ucrania no han cesado desde entonces y ahora que ha ido a por todas, no va a parar tan fácilmente.
Esto es algo que se venía venir y se han estado preparando, porque sabíamos que irremediablemente la guerra llegaría tarde o temprano.
La mayoría de ucranianos apoyamos las decisiones de Volodímir Zelenski, porque es el mejor presidente que hemos tenido, y el único que ha tenido el valor de enfrentarse a Putin y no ceder ante sus amenazas.
¿Crees que se está dando suficiente ayuda a los refugiados que vienen?
Si, por el momento se está haciendo todo lo necesario por acogerles y salvar sus vidas, pero esto no va a acabar de un día para otro, y encontrar trabajo hasta que puedan volver puede ser un gran problema.
Si ya los que son de aquí tienen dificultades para encontrar trabajo, para ellos va a ser mucho más complicado.