Cuando realizamos nuestras compras, es importante tener en cuenta las diferentes opciones que se nos presentan. Una de las más interesantes son los mercados de alimentación, donde podemos encontrar productos frescos de temporada, una amplia variedad de artículos y una apuesta por la producción local.
En Petrer contamos con uno de estos ‘templos’ de cercanía que, precisamente, este mes anda de aniversario. Hace treinta y cinco años, concretamente un 12 de septiembre de 1989, abrió sus puertas por primera vez el Mercado de la Frontera, una instalación que supuso la culminación de un ilusionante y necesario proyecto para una zona de Petrer muy atractiva, que en aquellos momentos se encontraba en plena expansión urbanística y que gozaba de una cada vez mayor densidad demográfica.
Barrio en plena expansión
Durante aquellos años, el barrio de la Frontera se había convertido en objeto de deseo al experimentar un gran boom urbanístico y poblacional que había atraído las miradas hacia esta populosa zona de Petrer, desplazando el foco principal del centro histórico hacia la parte sur.
La vía donde se situaban los terrenos en los que se levantaría la nueva construcción, el camino Viejo de Elda, era el sendero que conducía a la vecina localidad. En esta avenida se concentraba un buen pedazo de la historia alfarera de la ciudad con la presencia de varias empresas cerámicas, que fueron desmanteladas para ser absorbidas para urbanizar la zona.
Fue inaugurado el 12 de septiembre de 1989
Restos del pasado industrial
Cabe decir que, como últimos vestigios de la industria petrerí en el barrio, se conservan a modo de recuerdo dos chimeneas y lo que fueron unos hornos que servían para la fabricación de material de construcción, reconvertidos en un espacio expositivo, que acoge importantes eventos culturales para la ciudad conocido como ‘Horno cultural’.
Dos años antes de la inauguración del Mercado de la Frontera, durante la primavera de 1987 se comenzó a hacer realidad el proyecto con las obras de desmontaje y desescombro de las antiguas cerámicas. Sobre su solar se levantaría el nuevo espacio, que antes de la inauguración ya tenía cubiertos todos sus puestos de venta.
Con su apertura venía a sumarse al otro gran centro de abastos municipal que existía entonces en Petrer, el Mercado Central, en la actualidad cerrado tras una larga y lenta agonía.
Tiene cuarenta y cuatro puestos dedicados mayormente al sector de la alimentación
Gran aceptación
El Mercado de la Frontera, por tanto, nació de pie. Situado en una estratégica ubicación, en una zona en pleno crecimiento urbanístico y demográfico, y objeto de deseo por políticos, comerciantes y vecinos que veían las enormes posibilidades que iba a traer para la zona, lo tenía todo para convertirse en una infraestructura de referencia.
Pronto se demostró que su construcción había sido todo un acierto con la llegada de clientes no solo de Petrer o de la cercana Elda, sino también de otras localidades próximas, que no dudaban en traspasar sus puertas en busca de la buena calidad y frescura de sus productos, unos precios competitivos, atención personalizada y un cercano trato familiar. Una filosofía que en la actualidad sigue estando muy presente.
No ha cambiado en gran medida el aspecto desde su apertura
Mercadillo no sedentario
A esta instalación, que en la actualidad cuenta con cuarenta y cuatro puestos, se le añadió otra propuesta que con el tiempo ha demostrado también su éxito. Hablamos del mercadillo de los miércoles y viernes por la mañana, que viene a complementar la amplia oferta que se puede encontrar en el interior. Ubicado en el acceso de la plaza anexa de la calle Filólogo Sanchis Guarner, cuenta con un total de cincuenta y siete autorizaciones, entre las que destacan, en mayor número, los puestos dedicados a la venta de frutas y verduras y de ropa y calzado.
No ha cambiado en gran medida el aspecto del Mercado de la Frontera desde su apertura hace treinta y cinco años. Sin embargo, lo que no se ha descuidado en todo este tiempo ha sido la realización de diversas obras de mantenimiento en su estructura. La mayoría, en 2014, con motivo de su veinticinco aniversario, con mejoras en zonas de fachada, cubierta, barandillas, aseos o alumbrado para optimizar la eficiencia energética.
Campañas de fidelización
Para poner en valor todas sus bondades comerciales, tanto ayuntamiento (el mercado es municipal y depende de la concejalía de Comercio) como la Asociación de Comerciantes del Mercado de La Frontera, lanzan periódicas iniciativas encaminadas a atraer la fidelización de los clientes a través de sorteos, promociones y cheques-regalo para gastar en los puestos asociados, y que gozan de una buena acogida.
La última de las iniciativas que se ha lanzado ha sido la firma de un nuevo convenio entre el ayuntamiento y la asociación para la integración sociolaboral de personas con discapacidad física y sensorial (Amfi) para la gestión del parking de la Frontera, que tiene por objeto, no solo facilitar el aparcamiento para los usuarios del mercado y de la zona, sino también promover la inclusión laboral de personas con discapacidad.
Puestos del Mercado de la Frontera
Frutas y verduras: 4
Frutos secos: 3
Carnicería y charcutería: 16
Pescadería: 4
Panadería y bollería: 3
Encurtidos y salazones: 4
Congelados: 4
Quesos: 1
Varios (joyería, ropa y complementos, droguería): 4
Bar/cafetería: 1
(información facilitada por la concejalía de Comercio)