El amor romántico viene dado culturalmente, se ha aprendido con el paso de los años, perpetuando así una creencia concreta sobre cómo deben ser las relaciones de pareja ideales.
María Iluminada Pérez López, psicóloga desde 2016 de ACOVIFA, la ‘Asociación contra la violencia de género y familiar de Alcoy y comarcas’, es la profesional encargada de realizar charlas informativas y preventivas sobre este tema en los centros educativos de la ciudad de Alcoy. Esta profesional es ‘Experta universitaria en malos tratos y violencia de género’ y trabajó como psicóloga del turno de oficio de psicólogos forenses de la Comunidad Valenciana de 2011 a 2016.
Comportamiento adolescente
Los adolescentes alcoyanos, al igual que cualquier adolescente del mundo, en las relaciones amorosas fijan su atención en la elevada atracción física y en la intensidad de sentimientos que experimentan en ese momento, donde todo se vive a lo grande, las sensaciones se magnifican y el grupo de iguales y las relaciones personales son priorizadas ante cualquier aspecto.
“Como etapa de transición entre la infancia y la edad adulta, los adolescentes quieren tener comportamientos propios de adultos, pero sin los recursos suficientes. Los cambios hormonales son constantes y se viven de forma muy intensa, tanto en lo bueno como en lo malo. Los adolescentes lo viven todo con pasión, y aquí también se incluyen las relaciones de pareja”, afirma Pérez.
Se sobrevalora a la pareja hasta el punto de llegar a idolatrarla
Idealización del amor
En las aulas es evidente la idealización del concepto del amor romántico. La psicóloga observa una falta de conocimiento en cuanto al amor saludable y creencias erróneas referentes al papel de la mujer en la pareja. Hay una sobrevaloración de la pareja hasta el punto de llegar a idolatrarla y, en muchas ocasiones, esto les lleva a comportamiento erróneos a la hora de relacionarse.
Entra en juego también una edad complicada, en la que la aprobación entre los iguales es fundamental y donde la falta de seguridad en uno mismo puede hacer que se acepten chantajes y/o conductas violentas y permitir el aislamiento y/o la despersonalización.
Esto según Pérez, hace imprescindible llevar a cabo un trabajo de reeducación, prevención e intervención en los más jóvenes, desde los centros escolares. “La gente joven justifica comportamientos dañinos en nombre del amor; apuestan por un amor incondicional y dejarlo todo por amor, ambas cosas muy peligrosas e irreales”.
Muchos jóvenes siguen creyendo y defendiendo los mitos del amor romántico
Mitos del amor romántico
La psicología continúa diciendo: “Piensan que el amor todo lo puede y le otorgan propiedades mágicas avaladas por muchas letras de canciones actuales, novelas o películas, que lo venden como lo deseado en las relaciones de pareja, y esto es muy alarmante”, afirma.
Muchos jóvenes siguen creyendo y defendiendo los mitos el amor romántico, empeñándose en relaciones tóxicas y considerando el amor como algo tan extraordinario que escapa de la razón, permitiendo y aceptando incluso su malestar personal con tal de ser aceptado y deseado por su pareja. Este amor vuelve a jóvenes, y adultos, en personas posesivas, celosas y con necesidad de control o pertenencia.
«Hay una creencia de que controlar es una señal de máxima confianza» M. Pérez
Celos
La profesional confirma que suele asociarse que cuantos más celos siente de ti tu pareja más te desea, como si fuera una señal de amor auténtico: “Parece que se ha vuelto a instaurar la creencia de que controlar es una señal de máxima confianza. Nos sorprende ver cómo hoy en día aún hay parejas que comparten el mismo correo electrónico, llamándole con los nombres de ambos; tienen el mismo Instagram, el mismo Facebook, controlan a quien han puesto un like como si todo tuviese que contarse a la pareja, como si uno no fuese una persona única y todo lo que hicieras tuviera que ser revisado por el otro siguiendo así la idea de la ‘media naranja’: no somos nadie sin el otro y formamos juntos uno solo”.
Las relaciones posesivas suelen dar situaciones de violencia psicológica
Dependencia emocional
Esto se traduce en una dependencia emocional equiparable a una adicción. Cuando, sobre todo las adolescentes, forman relaciones sentimentales muy posesivas y traducen esta posesión como muestra de amor, suelen darse situaciones de violencia generalmente psicológica. Se exigen relaciones rígidas, exclusivas, transformando a la pareja en lo único importante de la vida: “Cuando dejas de ser tú misma y no puedes diferenciar entre amar y sufrir, estás inmersa en una dependencia”.
El miedo a la soledad, el creer que no mereces nada mejor, el miedo a no conseguir a nadie más y a no ser nada sin el otro, mantiene esta dependencia. Se vive una incapacidad para cambiar la forma de relacionarse en la pareja, no existen aficiones, ni motivaciones para una misma o uno mismo. Llega el sufrimiento, pero se normaliza y se perdona con mensajes contrapuestos de amor: “Parece que en nombre del amor todo vale, esta es la idea que habría que cambiar”, explica Pérez.
«Los jóvenes deben aprender a entender el amor desde la amistad» M. Pérez
Combatir el machismo y la violencia
La psicóloga tiene claro que se necesita un cambio social desde la infancia, educar desde la igualdad de género, eliminar mensajes que ensalzan el amor romántico donde la mujer tiene un papel pasivo y se relaciona sentimentalmente en desventaja respecto al hombre. “Habría que reeducar a los jóvenes para que entiendan el amor desde la amistad y evitar así que inicie relaciones tóxicas”.
El ‘mal de amores’ es un problema de salud pública y la profesional cree estaría bien que los medios de comunicación contribuyeran con estos mensajes; también la literatura, la música, etc. Es importante que se deje de apoyar las relaciones amorosas desiguales y el amor tóxico, realizar campañas en contra del amor romántico, para que los más jóvenes entiendan el amor desde la libertad, desde el crecimiento y el bienestar en pareja y por fin dejar de normalizar el sufrimiento en el amor.
Homosexualidad y heterosexualidad
“El recorrido vital y la mochila emocional que trae el rechazo, la violencia y/o el bullying, hacen más vulnerables a sufrir dependencia emocional en sus relaciones amorosas a personas homosexuales”, comenta Pérez.
La psicóloga añade: “Esas heridas emocionales son derivadas de las inseguridades sufridas y de graves problemas en la gestión de las emociones. Para cualquier persona que haya sentido rechazo, discriminación o aislamiento por parte de su entorno, siempre va a tener más dificultades para relacionarse, ya que en su forma de apegarse ha habido mucho sufrimiento”. Pero esto también ocurre en parejas heterosexuales.
Fuentes de información
La educación sexual de los menores no atraviesa un buen momento en España. Al contrario que en otros países vecinos, aquí no se contempla en el currículum escolar. Los expertos la describen como una educación sexual “desastrosa”. Se deja al criterio de los centros educativos y en muchas comunidades hoy día aún se necesita el consentimiento paterno para que los menores la reciban y la puede impartir cualquiera.
Cuando el porno es la principal fuente informativa, lógicamente crece el machismo entre los más jóvenes y en la expresión del mismo en sus relaciones sexuales. El machismo en cuanto al sexo condena a la mujer atrevida y gratifica el poder del hombre ante la mujer. La mujer se ve como un objeto de posesión del hombre y con el poder que dan las nuevas tecnologías se transmite cada vez más fácilmente este gravísimo modelo.
«La música, medios y redes no favorecen el cambio» M. Pérez
Generaciones actuales
Un estudio del Ministerio de Sanidad, sobre la evolución de conductas violentas y patrones sexistas entre menores, concluía que el porcentaje de chicas que reconocía haber sufrido insultos subió del 14 al 23% entre 2010 y 2013. Por esas fechas, una encuesta de la Comunidad de Madrid desveló que al 5,3% de las adolescentes de entre 14 y 16 años “el chico con el que salían la había impuesto conductas de tipo sexual”.
Actualmente el tipo de música que más se consume entre los jóvenes, los medios de comunicación (anuncios machistas), las redes sociales, la ausencia de coeducación en las familias y escuela o la transmisión del amor romántico como algo positivo, no favorece a que las relaciones de estas generaciones sean saludables y dejen de ser dependientes, ya que se vende y se aplaude un amor de necesidad y no de preferencia, olvidando la amistad como parte esencial para conseguir un amor saludable.
El papel de ACOVIFA
ACOVIFA nace en 2007 y surge de una necesidad social existente en Alcoy. Fue creada por un grupo de mujeres alcoyanas que necesitaban apoyo y sentirse identificadas y reforzadas en su problemática de abuso. Atienden tanto problemas de violencia de género, como familiar, acoso escolar y laboral porque muchas veces la violencia o el abuso se repite en distintos ámbitos vitales, hasta que es tratada dicha problemática y se rompe con la cadena de violencia.
Es el único servicio cercano, neutral y específico que existe en Alcoy, donde las personas pueden recibir apoyo psicológico tras haber recibido una situación de abuso continuado.
Talleres y terapias
La asociación realiza diversos talleres de relajación, de empoderamiento, de informática, de estética, de artesanía, etc. Aquí las mujeres además de aprender crean vínculos entre ellas y consiguen llegar a la identificación con apoyo mutuo. También realizan terapias de grupo guiadas por la profesional como reforzadoras a la terapia psicológica individual.
Cada año se atienden sobre un centenar de casos de violencia de género y familiar, numerosos casos de acoso escolar y laboral y se siguen realizando múltiples charlas de prevención escolar a petición de los centros escolares de nuestra ciudad. Cuenta también con un programa de intervención propio contra el bullying llamado ‘Desmárcate’.
Equipo de trabajo
La asociación cuenta con el trabajo de dos técnicas, además de la junta directiva de la asociación; todos trabajan codo con codo en la realización de las actividades y la prestación de los servicios para los que nació hace ya más de una década.
Además de la atención psicológica cuentan en el equipo técnico con expertos en criminología, una administrativa, Cristina Raso que aún permanece en el equipo, trabajadora social, etc. y desde la junta directiva con el presidente actual, especializado en gestión y administración, Gabriel Aura, la promotora de igualdad, Mª Teresa García. En el equipo de voluntarios cuentan con un abogado experto y colaborador habitual, José Ferrándiz.