Decía Borges que se imaginaba el paraíso como una especie de biblioteca. No sabemos si el genial escritor argentino, fallecido precisamente un mes de junio de hace ahora 36 años, tenía en mente alguna en concreto o hablaba tan solo en sentido figurado.
Lo más seguro es que ese modelo de un más allá literario que alimentaba la fértil imaginación del autor de ‘El Aleph’ estaría en la mítica Biblioteca de Alejandría, aquella fabulosa biblioteca consagrada al conocimiento de la antigüedad, que recopilaba en un mismo lugar prácticamente todo el saber humano, en una suerte de colección inmortal destinada a perdurar durante toda la posteridad y que fue incendiada accidentalmente por Julio César en el año 47 a. C.
Según datos de los gremios de libreros y de editores de España, el pasado 2021 se compraron entre un 15 y un 20% más ejemplares en papel que en los últimos años
Centros de lectura
Pero no es necesario irse tan lejos en el tiempo y el espacio. Bajando a un plano mucho más cercano a nosotros, las bibliotecas siguen siendo espacios culturales de encuentro con un mar de libros al alcance de cualquier curioso que se atreva a adentrarse en sus estanterías en busca de nuevas emociones.
Mucho han cambiado desde aquellos tiempos remotos hasta hoy. Ni siquiera son las mismas que hace treinta o cuarenta años. La era digital nos ha facilitado un acceso más sencillo e inmediato a los fondos documentales que, en muchos casos, se pueden consultar desde cualquier dispositivo tecnológico desde la comodidad de nuestro hogar.
También nuestras necesidades y gustos literarios de hoy son otros, al igual que la forma de acercarnos a estos centros de lectura. Pero si hay algo que permanece inalterable al paso del tiempo y las modas son los libros, retazos del alma salidos de la imaginación de un escritor que esperan a que alguien abra sus páginas para dar vida a miles de historias.
Dos bibliotecas en Petrer
En Petrer contamos con dos bibliotecas públicas municipales y las dos llevan el nombre de sendos poetas locales: la biblioteca Poeta Paco Mollá, situada en la calle San Bartolomé, 5, que da servicio al centro histórico de Petrer y alrededores; y la biblioteca Poeta Enrique Amat, en la Plaza Paco López Pina, 4, en la zona del Campet y Chimeneas.
En ambas podemos encontrar aproximadamente 70.000 registros entre libros, revistas, material audiovisual y sonoro (CDs y DVDs) y publicaciones periódicas locales. También sus salas sirven como punto de lectura, de consulta y de estudio.
Allí nos cuentan que, tras meses alejados de ellas por la pandemia y las restricciones, hemos vuelto de nuevo a pisar estos espacios de cultura. De hecho, la pandemia parece haber dado un buen empujón al consumo y venta de libros.
El Día de las Bibliotecas se celebra cada 24 de octubre
Más venta de libros en papel
Según datos de los gremios de libreros y de editores de España, el pasado 2021 se compraron más ejemplares en papel que en los últimos años, entre un quince y un veinte por ciento más, algo que tiene una explicación lógica en un público saturado de pasarse horas teletrabajando frente a la pantalla de un ordenador.
Son tendencias en el hábito lector que se reflejan en las bibliotecas, donde, como en un microcosmos, se pueden saber los gustos literarios, qué libros son los que más se leen y qué géneros son los preferidos de la gente.
Intriga, novela negra e historia son los géneros más demandados
Libros refrescantes
La literatura nos abre puertas al mundo y nos empuja a una vida más allá de los confines de nuestra realidad. Con la entrada este mes del verano y la llegada del buen tiempo, cambia nuestro ánimo, nuestro carácter se adapta al calor y nos apetece salir más.
Una buena opción, sin duda alguna, es sentarnos en una terraza, en un parque, en la piscina o a la orilla de la playa y dejarnos arrastrar por las páginas de un buen libro.
El año pasado se prestaron un total de 9.189 libros en la Paco Mollá y 8.675 en la Enrique Amat, cifras que sin duda se superarán este año en el que la mayoría de las restricciones han quedado atrás.
Novedades literarias
¿Y qué libros son los más prestados? Actualmente, nos cuenta Almudena Blasco, bibliotecaria en la Paco Mollá, hay una demanda muy alta de géneros relacionados con la intriga, la novela negra y la historia, con autores superventas a la cabeza como Santiago Posteguillo y otros en auge como Ibon Martín.
Aquí, los libros más solicitados son las últimas novedades, los best-sellers que están en boca de todos y tienen más gancho, como ‘Sira’, de María Dueñas; la trilogía de Carmen Mola, pseudónimo colectivo de los tres autores ganadores del último Premio Planeta; ‘Roma soy yo’, del mencionado Santiago Posteguillo, o el thriller ‘El libro negro de las horas’, de Eva García Sáenz de Urturi.
Con los más jóvenes se ha producido una revolución de lectores, leen sobre todo mucho cómic, y también libros de youtubers, que ahora está de moda. Por su parte, entre los más pequeños de la casa triunfa el álbum ilustrado.
Entre los lectores triunfan las últimas novedades editoriales
También los clásicos
A pesar de que la mayoría de los libros que se piden son los relacionados con la narrativa actual, nunca faltan los lectores que siguen demandando clásicos de la literatura universal como ‘El guardián entre el centeno’, de J. D. Salinguer, “que de tanto prestarlo hemos tenido que cambiar el ejemplar varias veces a causa del deterioro”, nos confiesa Blasco.
Por su parte, a los jóvenes les gusta mucho la escritora Laura Gallego, autora especializada en temática fantástica, mientras que entre el público infantil destacan libros de éxito como ‘El monstruo de colores’, de Anna Llenas, sin dejar de lado obras inmortales de todos los tiempos como ‘Caperucita Roja’ o ‘Blancanieves’, que siguen cautivando generación tras generación.
La animación lectora es una de las actividades estrella
Seducir a lectores
Precisamente, un reto al que se enfrentan las bibliotecas es el de atraer a todo tipo de lectores y convencer a cada vez más gente para que se acerque a la lectura, sobre todo a los adolescentes.
Almudena nos explica que la mayoría del público usuario de las bibliotecas municipales de Petrer es bastante variado, hay mucho adulto, pero son los niños los que más cantidad de libros se llevan en préstamo para casa.
Para dar a conocer el valor de los libros, las dos bibliotecas organizan periódicamente actividades de promoción a la lectura con la participación de cuentacuentos y animadores con la intención de fomentar hábitos alrededor de la literatura.
Más de 17.000 libros se prestaron el pasado año entre las dos bibliotecas
Animación Lectora
Una actividad que tiene mucho éxito entre el alumnado y se lleva realizando años es la campaña de animación lectora, en la que participan todos los colegios de educación infantil y primaria de la localidad. Con ella se persigue popularizar los centros de lectura entre los escolares e inculcarles el amor por los libros desde edades muy tempranas.
Blasco nos cuenta que esta iniciativa cala bastante bien entre los niños y niñas, ya que “muchos de ellos regresan con sus padres para hacerse el carné, un servicio totalmente gratuito que permite el acceso a todo el fondo general existente en las dos bibliotecas de Petrer”.
Recomendaciones
Trabajar rodeado de libros, qué duda cabe que tiene sus ventajas. Alguna de las más significativas es tener acceso a las últimas novedades editoriales. A la hora de hacernos recomendaciones, Almudena tira de títulos como ‘Tierra’, de Eloy Moreno para el público adulto; ‘La vida ilustrada’, de Lisa Aisato para el juvenil; y ‘Camuñas’, de Margarita del Mazo, para los niños.
Por último, y ya que hemos comenzado este reportaje sobre libros y bibliotecas con la cita de un escritor universal como Jorge Luis Borges, no nos hemos resistido a despedirlo con otro insigne autor, esta vez español, Marcelino Menéndez Pelayo, director de la Biblioteca Nacional de España a principios del siglo XX: “Vivir entre libros es y ha sido siempre para mí mi mayor alegría”.
Historia de las bibliotecas municipales de nuestra localidad
La biblioteca Paco Mollá se inauguró el 25 de octubre de 1964 y la Enrique Amat el 27 de mayo de 1999
A principios del siglo XX se ubicó en el edificio del ayuntamiento la primera biblioteca pública que existió en Petrer. En la década de los años treinta fue trasladada al colegio Primo de Rivera, aunque no fue hasta 1964 cuando se inauguró la que realmente podemos considerar como primera biblioteca municipal.
Se abrió en la plaza de Baix, llamada entonces plaza del Generalísimo, justamente donde hoy se albergan las dependencias de la Oficina de Turismo, un edificio con mucha historia a sus espaldas y que anteriormente había sido pósito municipal, escuela, dispensario de higiene y vivienda para maestros.
Inauguración en 1964
La inauguración de este centro de lectura tuvo lugar un 25 de octubre de 1964, coincidiendo con la festividad de San Crispín, patrón de los zapateros, y logró convocar a numeroso público y a las máximas autoridades municipales y provinciales con el alcalde Nicolás Andréu a la cabeza.
En un principio, al convertirse en biblioteca, el edificio conservó su fachada y ocupó tan sólo la planta baja. En 1982 fue reconstruido y durante el transcurso de las obras el servicio municipal de lectura se ubicó en las dependencias de la Casa del Fester.
Tras la remodelación ocupó todo el inmueble, pero pronto se mostró insuficiente para albergar todos los fondos bibliográficos y a unos usuarios que demandaban un servicio de lectura e información acorde con los tiempos que corrían.
Traslado a nuevas instalaciones
Así, a finales de 1998, se trasladó al nuevo centro cultural de la calle San Bartolomé, dejando su lugar al Museo Dámaso Navarro, y siendo inaugurada el día 4 de diciembre con el nombre oficial de Biblioteca Municipal Poeta Paco Mollá.
El nuevo centro cultural supuso la culminación de un proyecto largamente esperado que dotó a Petrer de unas instalaciones modernas, y con un centro de lectura municipal adaptado a las necesidades de sus socios y usuarios. La biblioteca abrió con algo más de 26.000 volúmenes, además de una importante dotación multimedia y una amplia selección de discos compactos.
Para completar la oferta bibliográfica del municipio y dar servicio a la cada vez más numerosa población del barrio de la Frontera, el 27 de mayo de 1999 se inauguró la Biblioteca Municipal Poeta Enrique Amat, en la Plaza Paco López Pina, en un moderno edificio que cuenta también con otras instalaciones de carácter cultural.